domingo, 24 de noviembre de 2013

STOP ETIQUETAS


¿Qué pasaría si todos nos conociéramos por la etiqueta que nos ponen? Anna es muy tonta. Raquel es demasiado confiada. Juan es muy enamoradizo. Iván es un chulo! Si ya en la vida normal es difícil sobrevivir con tantos prejuicios y etiquetas... ¿Qué pasaría si ahora extrapolamos este tema a un contexto educativo?
 
No es lo mismo tener la etiqueta de "el listo de la clase" a la de "el tonto de la clase". Simplemente, creo que no favorece a nadie el uso de etiquetas. Realmente, el que tiene una mala etiqueta, se va a hundir y va a pensar que jamás podrá alcanzar aquello por lo que todos lo apodan. Y el que tiene una buena etiqueta, tampoco creo que pueda sentirse afortunado, ya que al tener esa etiqueta, la gente tendrá altas expectativas sobre esa persona, y si no las cumple, su motivación y su prestigio caerán en picado.


Por todo esto, pregunto... ¿Qué beneficio tienen las etiquetas? La respuesta es NINGUNO. Y no solo es que no tenga ningún beneficio, sino que además, tiene muchísimas desventajas. Por lo tanto, ¿por qué seguimos usándolos si solo provocan resultados negativos y perjudican a los niños?

Dejemos que los niños sean niños, no nos fijemos tanto en qué momento evolutivo se encuentran y cómo deberían actuar acorde a eso, y ayudémosles en vez de hacerles ese flaco favor de ponerles etiquetas.
 
No hagas lo que no te gustaría que te hicieran. ¡STOP ETIQUETAS!

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario